Desconocía el ambientazo que se monta en invierno en el Puerto alrededor del mundo de la vela.
Por un lado, los de vela ligera no paran, equipos de todo el mundo vienen a la bahía a entrenar en invierno, las ligas de optimits y láser, los pro navegando, es un gustazo salir en días como el último que lo hicimos, y ver a chavales en una bañera con olas que les tapan el palo.
Por otro, los cruceros. Club del mar, Calderon y Taberna del Marinero, tres fines de semana al mes para navegar...mucho que negociar
Fuimos ventiseis barcos, con salida compensada, los que regateamos el último día. Es una excusa excepcional para concentrarse alrededor de un desayuno de migas, y después de navegar, de un marmitako de atún. Salimos los vigésimo primeros, y a pesar de una salida bastante regular, hicimos sextos, con una entrada de foto finish.
Día espectacular, impaciente por la siguiente